¿Se puede ser más cínico y mentiroso?, “Sí se puede”
Reapareció Mauricio Macri en un canal opositor y volvió con su clásica psicopatía, mostrando su más alto cinismo y lleno de mentiras para tratar de ocultar verdades y errores de su gestión en el Gobierno. Un depredador de la realidad, que no dejó nada sano tras su paso por el poder formal, pero que se presenta como alguien inocente, que no tuvo ingerencia ni responsabilidad en nada de lo que ocurrió durante sus cuatro años de Gobierno. Por Marcela Fuentes
Porque si algo se puede asegurar, sin error a equivocarse, es que es un mentiroso serial. Un psícópata de manual. Un negador de la realidad y un cínico e inventor de falsedades. Macri es el invento del poder real de una Argentina para pocos.
Será por eso que, en los únicos lugares donde se atreve a realizar declaraciones, es en los medios de comunicación opositores y afines, que le arman el escenario propicio para transmitir y tratar de convencer a una parte de la sociedad con sus mentiras. Mentiras que arrastra desde su aparición en la vida privada y pública del país.
Mauricio Macri reapareció en una entrevista televisiva en TN, tras su estadía de placer en Europa, sólo para criticar nuevamente al gobierno de Alberto Fernández. Tras su derrota electoral en 2019, no hizo más que victimizarse atacando al Gobierno de los Fernández.
Gracias a sus logros personales y de sus socios y amigos, hoy tiene en su haber, más de 200 causas en la Justicia, entre ellas, -la última conocida y trascendente- la del contrabando agravado de armas a Bolivia, para colaborar con el golpe de Estado. Pero de eso no se habla, y de las demás causas, según él, son todas inventadas.
Cuestionó la autoridad moral del Presidente por “la foto de Olivos”, como si él tuviera autoridad moral para calificar la conducta de los demás. Llegó al poder en 2015 haciendo promesas que jamás cumplió, estafando la confianza pública de todo el electorado, propio y ajeno.
Habló del rumbo económico de su Gobierno: “La Argentina tenía un rumbo, sin dudas no estuvimos a la altura, pero había otra cultura de poder con una sana voluntad de querer rendir cuentas. Sin verdad no hay confianza”. “Asumo mis equivocaciones, pero la Argentina tenía un rumbo, por algo vinieron todos los líderes del mundo diciendo sigan por ese camino”. “Este país, por culpa de este Gobierno, expulsa a los jóvenes, a las empresas, a los que quieren invertir en el país”. También, se refirió a la deuda y cuestionó a la vicepresidenta Cristina Fernández, al decir que “ella tomó mucha más deuda de lo que yo tomé y ella recibió su gobierno con superávit”. “En su primer año, Alberto (Fernández) tomó más deuda que en nuestro gobierno”.

Falso. Tan falso como su entrevistador. Macri tomó créditos impagables y endeudó el país a cien años. Quiso condonarse una deuda propia con el Estado (causa Correos, una quiebra que lleva más de 20 años sin resolverse en la Justicia. ¿Y afirma que la Justicia funciona bien?. ¿Será por eso que tanto él como su frente opositor (JxC) se oponen a una reforma judicial?. Es obvio que se benefician con el status quo.
Hizo alusión a la interna de Juntos por el Cambio y se mostró molesto porque el espacio en Provincia se llamó Juntos. “Fue un acto de independencia absoluta y no sé porque”.
En su lógica, él no acepta la “independencia” de ningún poder, sino “la dependencia absoluta a su propio poder”, que es justamente lo que hizo en sus cuatro años de Gobierno. Avasalló los poderes de Estado y los utilizó para beneficio propio y de sus amigos y socios. Hoy algunos están prófugos de la Justicia o lo estarán en algún momento, porque la acumulación de pruebas en contra, va a hacer estallar por los aires los tribunales federales, comerciales, y contenciosos administrativos y muchos jueces y fiscales tendrán que renunciar para no ser alcanzados por los juicios por sus malos o corruptos desempeños.
Y, entre otras cosas, a pesar de que dentro de su propio espacio piden que se jubile, admitió que “No tengo edad para jubilarme, tengo una pasión por mi país que no se va a apagar. No me voy a ir de este mundo sin ver a la Argentina progresando”.
¿Se puede ser más cínico y mentiroso, más dañino para toda la sociedad?. Sí se puede.
“Dar a cada uno lo suyo”, nos enseñaron en la facultad de Derecho de la UBA.
Por eso, el Gobierno Nacional tiene y debe asegurarle al expresidente, Mauricio Macri, que tendrá una Justicia independiente, y que obviamente y objetivamente, “no se va a ir de este país y del mundo”, sin que se haga Justicia por todo el estrago doloso que le ha causado al país y a sus futuras generaciones. Es un deber y un derecho de todo argentino de bien, pero justamente él no es un fiel representante.
